Soy Chester.
Me llevaron a esta manada con 5 meses… Ahí me tenéis mi primer día disimulando mientras Lula, una gata de 4 años, no muy convencida, me mira preocupada, y tenía razón, me lo paso pipa incordiándola. Le he quitado su puesto y apenas entra en la casa, aunque… me estoy cansando, insisten tanto que a lo mejor para el invierno la dejo en paz.
Tengo mucho sitio cuando me sacan a pasear, pero esa foto de pose fue porque insistió mucho; yo, prefiero ir con el hocico a ras de suelo, hay tantos olores…..
Soy el juguete, está claro, los tengo encandilados, pero mi ama, a la que persigo a muerte, persiste muuuucho y me enseña. Está claro que la llevo yo paseando, jeje, los demás pasan y solo les hago caso para jugar, y comer, claro!. El de la voz tan fuerte cuando se enfada -me tengo que poner recto- no quiero saber quien es mas cabezón. El pasota cuando me hace caso nos lo pasamos chupi. La que nunca me ha gritado me dio pena y decidí un día que también sus juegos y cariños merecían la pena, pero nunca le hago caso….. Aquí quien manda y está siempre es el ama, la vuelvo loca, pero ella a mí también. Han pasado 6 meses y voy a cumplir un año, y el chollo se va a acabar, no me pasan ni una, después de aprender que siempre me ponían comida, decidí hacerlo cuando ellos dicen, incluso lo que ellos dicen que no se come, menos las alfombras.
Ahora estoy pasando hambre, pero no me dan nada de eso que huele tan bien. Me he cargado todo tipo de correas, ya me duele el cuello de ir tirando, y sólo lo hago cuando estoy estresado, es decir, cuando tengo miedo -que es a todo, sonidos, autos grandes, personas de negro, que hablen fuerte, si no me dejan hacer mis cosas donde quiero en la calle….- No sé si será normal, igual huelo todo, pero de lejos ver, ni torta, y cuando los reconozco no puedo controlar mi alegría, y sé que ellos también… Siempre vuelven.
Un saludo desde España.
Chester. Un perro normal.