Antes de nada, hay que aclarar que este artículo está escrito como casi todo en el blog: según la experiencia que mis perros beagle me aportan a lo largo de los años. La única intención de escribir sobre salud canina es para ayudar a otros dueños a detectar síntomas en sus perros antes de que sea demasiado tarde. Internet está muy bien para conocer otras opiniones y aprender, pero es un error pretender curar a un animal haciendo una búsqueda en Google, a menos que se esté buscando un veterinario, algo que yo siempre recomendaré.
Mi perro Garret ha añadido otra enfermedad a su historial, ahora se está tratando de una ‘hipertrofia benigna de próstata» (HBP), algo que por lo visto es consecuencia natural del envejecimiento, y que se manifiesta en un 80% de los ejemplares machos, a partir de los 5 años. Él ya tiene 9 años, pero es verdad que desde hace tiempo veníamos observando algunos de los síntomas, a los cuales no le dábamos demasiada importancia, ya que no eran permanentes, incluso me atrevería a decir que estaban estrechamente relacionados con los periodos de celo de Gala (mi beagle hembra).
¿En qué consiste la hipertrofia benigna de próstata?
Esta enfermedad consiste con un aumento del tamaño de la próstata del perro, provocado por una hormona masculina, la testosterona. Los síntomas pueden ser diversos: dolores abdominales, dificultades a la hora de defecar, sangre en la orina, incluso trastornos de carácter muscular.
Hace unos días decidimos llevar a Garret a la consulta veterinaria porque defecó 6 veces en el paseo matinal, y en una de ellas hasta lloró de dolor. Esto no ha ocurrido de pronto, ya que desde hace meses veníamos comentando la cantidad de veces que Garret defecaba en los paseos (dos o más veces). También aparecían algunas manchas rojizas en algunos de los canastos, las cuales ignorábamos pensando que eran de Gala. Incluso hace unos días nos sorprendió verlo orinar en uno de los sofás. Es evidente que todo esto ha sido consecuencia de la inflamación, cada vez más pronunciada, de su próstata.
El tratamiento de la hbp
En la clínica veterinaria tomaron una muestra de orina de Garret para analizarla, además de hacerle una exploración anal a su próstata, la cual estaba «como una pelota», según la doctora. Se le inyectó una dosis de corticoides que ayudara a bajar la inflamación, y además se le recetó un tratamiento para diez días de un antibiótico muy fuerte (Pradofloxacino – Veraflox), acompañado de otro medicamento a base de acetato de osaterona (Ypozane), que es específico para curar la HBP en perros.
El tratamiento con Ypozane tiene una respuesta clínica de 5 meses, es entonces el veterinario, pasado ese tiempo, quien tiene que valorar la aplicación o no de otra dosis (7 pastillas en siete días).
Hola Adfer, buenos dias! Siempre es un placer leer tu blog ya que considero que he encontrado a la persona que mas sabe de beagles. Por sugerencia de mi veterinario, castre a Bruno hace 2 meses. ¿Puede ser que la castracion le haya modificado algunas conductas? Tiene un hambre voraz!! Lo noto muy ansioso. Cuando salimos a pasear, quiere llevar el la correa y yo he aplicado una tecnica para que la suelte (piso la correa, la agarro y se «entrega») seguimos con el paseo y vuelve a querer agarrar la correa, es como que no aprende que quien dirige el paseo soy yo (testarudo). Agredeceria tu aporte a mi inquietud. Saludos. Claudia.
Hola Claudia. No tiene por qué deberse a la castración. Los perros, y especialmente los beagles dominantes, siempre buscarán la manera de escalar posiciones en la «jerarquía de la manada». Considera que tu perro te está poniendo a prueba, por eso es bueno no bajar la guardia. Para eso no hay nada mejor que la disciplina, y puede ser un buen momento para recordar varias veces al día las órdenes sentarse, echarse, quieto, etc. Gracias por tus palabras. Saludos.
Gracias por tu respuesta!! Saludos desde Argentina!!
Hola Adfer, Garret tu Beagle esta precioso se parece mucho a Milka, y a pesar de ya contar con 9 añitos, se le ve muy bien, que lastima que este enfermito y bueno ni hablar, hasta ahora que tengo la oportunidad de tener una perrita, me doy cuenta de todas las enfermedades que ellos pueden tener como nosotros los humanos, lo más triste de todo es que ellos no saben hablar, y dependen de tener un dueño que los quiera mucho, y un excelente Veterinario para que los sepa revisar y sea acertado en el diagnóstico y los sane. Espero el tratamiento de Garret sea el correcto y pronto este bien de salud, muchas gracias por compartirnos saludos Laura Elena de México, D.F.
Gracias Laura. Garret está muy recuperado, a los diez día su análisis de orina ya estaba bien, y la próstata mucho mejor. Ahora habrá que ver cómo evoluciona pasados los meses. Saludos.